miércoles, 2 de enero de 2019

El ligamento cruzado posterior


La rotura de ligamento cruzado posterior es una lesión muy común, sobre todo, en aquellas personas que practican deportes como el fútbol, el sky o baloncesto, entre otros.

El ligamento cruzado, tanto el anterior como el posterior son esenciales para la estabilidad de la rodilla por lo tanto cuando este se rompe cada vez que se apoye el pie en el suelo se nota un dolor muy intenso.  Y, cuando esta rotura se produce, se  siente una inestabilidad muy importante y, sobre todo, cuando se camina, como si la rodilla no es encontrara sujeta o estable. En la mayoría de los casos, la rotura del ligamento cruzado también lleva consigo un derrame interno.



Esta lesión se ve a través de una resonancia magnética.  Lo aconsejable es realizar una intervención quirúrgica en la que se reconstruye el ligamento mediante injerto del tendón del propio paciente bien del tendón rotuliano o del tendón del musculo semitendinoso que es uno de los músculos que forman los isquiotibiales en la parte posterior del muslo.

¿Cómo es la recuperación?

Primero cabe señalar que la recuperación es dura y costosa. Esta oscilará entre los 6 y 9 meses aunque depende siempre del caso y, sobre todo, del propio paciente. En la recuperación, la rehabilitación y, por tanto, la presencia del fisioterapeuta es básica para poder seguir al paciente en sus sesiones y en su recuperación, mediante ejercicios y tratamiento específico para su lesión. Si es tu caso, nosotros estaremos encantados de ayudarte en la misma.






martes, 18 de diciembre de 2018

¿Qué tipos de lesiones musculares existen?



Hoy vamos a hablar de qué lesiones musculares son las más frecuentes para que podáis poner mucho más cuidado en la práctica de deporte o en los movimientos bruscos y, de esa manera, poder llegar a evitarlas.

- Contusión muscular: La contusión se produce por una fuerza externa sobre el mismo músculo, que afecta al tejido conjuntivo que rodea al músculo.  Los síntomas más comunes es que la zona se inflama y puede aparecer también un hematoma. Además, es una lesión que duele tanto en reposo como en movimiento.
- Calambre muscular: Este corresponde cerca del 15% de la patología deportiva y es el primer paso de una contractura o distensión muscular.  ¿Por qué se produce? Se produce cuando el músculo se encuentra cansado o fatigado por alteraciones en las sales minerales o por una contracción súbita cuando no se encuentra preparado para ello y no se ha calentado el mismo previamente. Este se caracteriza por un dolor agudo que va cediendo a medida que el músculo se va estirando.


- Distensión muscular: Esta se caracteriza porque es un estiramiento que se produce en el músculo por encima de sus posibilidades. Es doloroso cada vez que el músculo se ejercita, no en reposo.

- Rotura de fibras: Una de las lesiones más comunes cuando se practica deporte. Esta ocurre cuando el músculo se estira de manera muy intensa y ocurre una contracción muscular muy brusca. Los síntomas principales es un dolor intenso localizado en un punto y, en ocasiones, un hematoma en la zona. El dolor es tanto en reposo como en movimiento.

- Rotura muscular: Este se produce cuando se desgarran varias fibras musculares o se rompe parcialmente un músculo. El síntoma es un dolor muy intenso.



El diagnóstico exacto de la misma o de las mismas será realizado por el profesional y la prueba complementaria de elección será la ecografía.

martes, 11 de diciembre de 2018

Osteocondritis disecante de rodilla


Con este nombre se conoce a un tipo de lesión de rodilla que suele presentarse en hombres jóvenes con una lesión anterior en la articulación.  Suele asociarse con un problema en la maduración de algún trozo del cartílago junto a la parte superficial del hueso a la que se encuentra adherido. ¿Por qué ocurre? No se conocen las causas exactas para poder señalar con claridad pero sí que podría ser por una interrupción en la zona del riego sanguíneo.



¿Qué síntomas tiene?

Los síntomas principales es dolor difuso en la rodilla a la hora de practicar deporte sea del tipo que sea y de la intensidad que sea. Aunque, hay que señalar, que a medida que la lesión va avanzando este dolor se va haciendo mucho más intenso y se va localizando en la parte lateral externa de la articulación.


En algunas ocasiones llega a producirse un derrame de líquido intraarticular, que produce una inflamación de la rodilla.
Uno de los problemas que tiene que esta dolencia vaya desarrollándose es el desgaste progresivo del cartílago.



lunes, 3 de diciembre de 2018

La triada


Una de las lesiones más temidas en lo que a la rodilla se refiere es la triada. En esta se encuentran afectados menisco, ligamentos cruzados y ligamentos laterales.  El tratamiento para esta es quirúrgico y una rehabilitación entre 6 y 12 meses.



¿Cómo se produce la triada?  La triada suele producirse como consecuencia de una desaceleración brusca en una carrera en la que el pie se queda clavado inmóvil en el suelo pero sí que hay rotación del fémur sobre la tibia con tal intensidad que las estructuras blandas que forman la rodilla no lo pueden soportar y, en ese momento, se caracteriza que ha sucedido una lesión por el intenso y profundo dolor que se sufre y, al mismo tiempo, porque resulta imposible caminar.

Sobre el 70% de las lesiones de triada la lesión afecta al ligamento cruzado anterior, al ligamento lateral interno y a uno de los dos meniscos, aunque también puede afectar a los dos meniscos y aún agravar más la lesión.



Es muy importante el diagnóstico exacto de la lesión y conocer qué zonas y en qué cuantía están afectadas para proceder a una intervención de envergadura pero sabiendo y conociendo el propio traumatólogo cómo proceder. En esta lesión la recuperación posterior, es decir, la fisioterapia y rehabilitación son cruciales. Tanto para ejercitar la zona paulatinamente como para ayudar al paciente en su recuperación de movimiento en la zona, de músculo y demás causas que produce la triada.

jueves, 29 de noviembre de 2018

Los meniscos y sus lesiones






Los meniscos medio y lateral se caracterizan porque son discos de tejido de cartílago que se encuentran dentro de la rodilla y cuya función principal es la de amortiguación.  Los meniscos los localizamos entre el fémur y la tibia; el menisco medial se encuentra en la parte interior y, por tanto, el lateral en la parte externa de la misma articulación.

Una lesión muy común en los meniscos son los desgarros, si estos se producen en el menisco externo puede no ir acompañada de otros daños pero si se produce en el interno también puede verse perjudicado el ligamento puesto que se inserta en el propio menisco.


Las causas más comunes de que se produzcan los desgarros es al girar la rodilla pero el pie continúa inmóvil en el suelo, fijo. Cabe señalar que en las personas con avanzada edad es muy frecuente que se produzcan desgarros con la más mínima lesión.

Este tipo de lesiones se localizan porque provocan dolor en la parte interna o externa de la rodilla e inflamación de la articulación, siempre dependiendo de cuál es el menisco que se encuentra dañado. Al mismo tiempo también se nota dolor y, en algunas ocasiones, se siente como un bloqueo interno de la rodilla al realizar movimientos.



El profesional es quien detectará esta lesión y procederá a su diagnóstico para poder determinar cuál es el mejor tratamiento a seguir, siempre dependiendo de la gravedad de la misma.

Desgarro del labrum de la cadera


Comenzamos este artículo señalando que la cadera es una articulación que se encuentra compuesta por una superficie a modo de esfera y una cavidad; el borde de esta cavidad está recubierto por cartílago en forma de anillo que se llama labrum y que se encarga de proteger el hueso y aislar la articulación. Si esta capa de cartílago se desgarra se produce una irritación en la cadera, limitación de ciertos movimientos y producir dolor.


Los síntomas más comunes para esta dolencia es notar que la cadera se traba en movimientos y, también que se produce un chasquido doloroso en movimiento.  Al mismo tiempo, también puede ser difícil y complicada la movilización de la pierna.

¿Por qué ocurre? A menudo se encuentran provocados por un giro repentino o brusco o por una caída sobre la zona. Aunque, también pueden producir desgarros en la zona sentarse de cuclillas forzadamente y estirar repentinamente la extremidad o también por la propia degeneración o artrosis de la cadera

lunes, 5 de noviembre de 2018

¿Qué es la artrosis de cadera?


La artrosis es la degeneración de las articulaciones o disminución del espacio que existe entre un hueso y el siguiente Esta se caracteriza u ocurre porque la superficie articular superior del fémur se articula con la pelvis formando la articulación de la cadera, que se encuentra cubierta de cartílago. La función de este cartílago es proteger los extremos de los huesos para evitar su desgaste por rozamiento pero, si se padece artrosis el cartílago se va erosionando poco a poco y los huesos chocan entre sí produciéndose desgaste y dolor



Los síntomas más característicos de la artrosis de cadera son el dolor y la rigidez de la misma, aunque también se puede trasladar este dolor a la parte trasera del muslo o a la rodilla siendo en este caso dolores referidos provocados por irritaciones de algún terminal nervioso. Este mismo dolor puede ser punzante e intenso después de la práctica de deporte.

No se puede señalar una causa concreta de por qué se puede padecer esta dolencia, pero sí que es cierto que el riesgo de padecerla va aumentando con la edad debido a la degeneración de todos los tejidos